Se la conoce como la Biblia de la moda, y no hay
mujer en el mundo que no la haya leído aunque sea una vez. En ella moda, fotografía, diseño y arte se conjugan de forma magistral. La revista está destinada a una mujer glamorosa,
elegante.
Nació en los Estados Unidos en 1892, fue fundada por Arthur Baldwin Turnure. Cuando éste murió, en 1909, la revista pasó a manos de la editorial Conde Nast Publications, Inc. (creada en 1908, cuya sede principal está en la
ciudad de Nueva York). Se trató de la primera publicación estadounidense que logró conquistar Europa, en Gran Bretaña comenzó a publicarse en 1916 y en Francia en 1924. Esta revista de moda y estilos de vida, considerada la más influyente a nivel mundial, hoy se edita en más de veinte países, como: Italia, Francia, Inglaterra, Australia, Brasil, China, Alemania, Grecia, India, Japón, Corea, México, Portugal, Rusia, España (en este país, por ejemplo, está desde los años ochenta y desde 2001 está disponible su versión online, con contenidos propios), etc.
Vogue, además, tiene otras ediciones, como
Men’s Vogue (lanzada en 2005),
Vogue Living y
Vogue Teen (destinada al público adolescente).
Pero, ¿porqué es tan importante vogue?.....
La revista ofrece producciones fotográficas de las marcas de moda más importantes, como: Dior, Chanel, Gucci, D&G, etc.; reportajes sobre las últimas
tendencias o acerca de las nuevas promesas en la moda, jóvenes diseñadores de moda como
Julien Fournié,
Ricardo Tisci u
Olivier Theyskens. Además, trabaja con las modelos más importantes del mundo, como Gisele Bündchen, Kate Moss, Naomi Campbell
(fue la primera modelo negra en posar en la portada de esta publicación), entre muchas otras.
Asi mismo, y quizás lo que la hace la más prestigiosa del mundo fashion, es que
cuenta con la colaboración de los más reconocidos escritores, fotógrafos, diseñadores e ilustradores internacionales (los mejores de todas las épocas han trabajo en las portadas dejando cada uno verdaderas obras de arte), entre ellos
Jordi Labanda.
En los Estados Unidos, Vogue tiene más de 1.000.000 de suscriptores por mes, y una circulación anual de 132.000.000 de ejemplares. Y tal es su importancia en el mundo de la comunicación y de la moda que en 2007 nació un libro de toda su historia, “In Vogue”. Éste cuenta con más de 440 páginas, en las que se destacan más de 1000 fotografías increíbles. Esta obra, presentada en el Museo de Arte Metropolitano de Nueva York, fue escrita por dos periodistas argentinos Norberto Angeletti -secretario de redacción del diario argentino Clarín- y Alberto Oliva -director de la versión española de la revista “Parents”, en Estados Unidos-, quienes trabajaron durante cinco años en el proyecto, logrando tener acceso a un material único; la propia revista tiene un archivo de acceso restringido donde se conservan los dos únicos ejemplares de la primera tirada de fines del siglo XIX. El libro, publicado en inglés por la prestigiosa editorial Rizzoli (la cual tiene sede en Nueva York y Milán), cuenta la historia de la publicación, en sus 115 años de vida, y la influencia que ha tenido (y tiene) en la cultura, la fotografía, el arte y el periodismo en general. Según los autores una de las cosas que los atrajo fue “la meticulosidad y la metodología con que se trabaja cada producción de moda”, en las cuales, por ejemplo, un vestido cuenta un momento histórico.
La edición estadounidense, la más importante, es dirigida en la actualidad, y desde 1988, por Anna Wintour (nacida en 1949), quien ha hecho de Vogue lo que es hoy, la revista de moda más sofisticada y relevante a nivel mundial. Ella misma logró convertirse en una figura que tiene la misma importancia que la propia publicación, ya que dicta tendencias y coloca en la cima, o en lo más bajo, a nuevos creadores. Incluso ha sido vanagloriada a nivel internacional por su increíble olfato para las últimas tendencias y por haber colocado en los más alto de la moda a modelos y a noveles creativos del diseño de ropa -se encargó de que casas de moda los contraten, como John Galliano quien le debe su trabajo en la firma francesa Christian Dior-. Se destaca por su fría personalidad, por lo que la llaman “Nuclear Wintour”.
Una de sus ex asistentes, Lauren Weisberger, escribió la exitosa novela “The Devil Wears Prada”, la cual se cree está inspirada en ella. Luego, el libro fue adaptado al cine en una película que protagonizó Meryl Streep, como Miranda Priestly, una editora de modas quien sería Wintour. En el filme se puede ver cómo esta editora de moda sólo le importa su ombligo y el de la revista, por la cual hace todo lo que tiene a su alcance, sin importar los sentimientos de la gente que la rodea.
Anna Wintour se inició en el periodismo de modas a principios de los años setenta en la revista Harper’s & Queen, pasó por un breve tiempo por la pequeña revista
Savvy, y luego, en 1975, trabajó como editora de modas en
Harper’s Bazaar en Nueva York, donde estuvo menos de un año. Después se convirtió en editora de moda de la revista “Viva” y tres años más tarde lo hizo en la revista
New York. En 1986 se convirtió en editora de la revista
Vogue en su edición británica y un año más tarde en la revista
House & Garden. En 1988 ingresó a la Vogue estadounidense como editora general, puesto que mantiene en la actualidad.
La publicación que antes había dirigido Grace Mirabella, se había enfocado más en estilos de vida que en la moda, por lo que cuando Wintour tomó las riendas de la misma este ámbito cobró sumo protagonismo.
Una de los cambios que hizo fue el de las fotografías de la portada, ya que mientras Mirabella mostraba los rostros de modelos reconocidas, las portadas de Anna pasaron a mostrar más el cuerpo, además de fotos tomadas en exteriores -con luz natural, en vez de hacerlas en estudios-.
Además, hizo producciones con modelos poco conocidas y en sus portadas empezaron a aparecer celebridades del espectáculo (como Nicole Kidman, Charlize Theron, Angelina Jolie, Melania Trump, Kate Winslet, Hillary Clinton, etc.).
Asimismo, se encargó de que los fotógrafos, maquilladores y estilistas tuvieran la misma importancia en las imágenes que las modelos. Otra cosa destacable del trabajo de Wintour es que el éxito que logró al expandir la marca
Vogue (desarrolló la creación de
Teen Vogue, Vogue Living y
Men’s Vogue) le hizo obtener el título de Editora del año por la revista
AdAge.